viernes, 27 de mayo de 2011

recordando

La ciudad prosigue su historia, esta noche se espera un eclipse de luna, el firmamento impasible avanza en el tiempo, mientras, los humanos destrozamos el equilibrio. Los buenos, los malos, los conformistas… El eje del mal es aniquilado por el cazador de recompensas, la cacería es latente, las armas de destrucción masiva no aparecen después de utilizar masivamente armas para encontrarlas, pero la cacería de musulmanes grandes y chicos, hembras y varones, militares y paisanos… desborda el sentido común, la libertad ofrecida por el cazador de recompensas es a cambio de muerte, mutilación y hambre, un pueblo no puede pagar la barbaridad cometida por un prójimo sobre él, con otra barbarie venida del "libertador" de la humanidad, padres sin hijos, hijos sin padres, grita, pero con los brazos y las piernas amputados, libre, pero con un fusil detrás de la cabeza. Tener el ejercito más poderoso del mundo y las armas más mortíferas es suficiente para hacer caso omiso de la humanidad y masacrar cualquier país sobre todo si hay riqueza (quítate el chaleco protector que voy a pegarte un tiro) destruye tus misiles que te vamos a atacar, "mil aviones, mil barcos" toneladas y toneladas de bombas, carros de combate y todo un ejercito de maquinaria logística, amén de trescientos mil soldados para cazar primero a Bin Laden matando y empobreciendo todavía más a aquel pueblo y después, dolidos porque se les escapó la presa han querido vengarse cazando al eje del mal arrasando pueblos y ciudades, sembrando el dolor y creando pesadillas. Mientras en las ciudades de todo el planeta la gente dolida por el proceder del mandatario del país más armado del mundo se moviliza oponiéndose, manifestarse es un duro varapalo asestado al cazador (pero eso no mata) y por lo tanto la cacería sigue asolando cualquier trozo de suelo que aparezca como sospechoso, un cazador dispara a cualquier matojo que se mueva y así es como van cayendo soldados cazadores cazados por cazadores. Muertos, muerte, desolación, impotencia… bombas, balas, destrucción… cuanto odio …caceroladas, mil tinieblas, la ciudad se altera preocupada por la  barbarie, caso omiso, el "general de la humanidad" no respeta las reglas y omnipotente ordena hostigar con fiereza a la presa ¡Qué locura! La despensa, los depósitos de agua potable, cuanto sufrimiento, heridos, más heridos, rimeros enteros de moribundos, hospitales rotos, humillación. Pero… la cacería prosigue, el dictador cae, las esculturas de su preponderancia se doblegan hasta besar el suelo ¿Merece la pena? La bandera americana ha conquistado la reserva petrolífera más grande de la tierra, el dominio americano ha desoído al planeta entero, los marines han amansado a la fiera haciéndole comer de su mano, pero el eje del mal no aparece, ni las armas de destrucción masiva tampoco ¡Pero es igual! Tenemos el petróleo, piensan. Ahora reconstruiremos lo que hemos despedazado y tan amigos.
Me preocupa el asentamiento, me preocupa porque el sufrimiento humano no se ha detenido, por un lado está la "presa" el pueblo iraquí, que humillado hasta la saciedad, no perdonará. Por otro los soldados americanos que con el falso patriotismo deberán defender fuera de sus hogares, el bienestar de las familias adineras de los Estados Unidos de América, mientras, vivirán en un estado emocional de miedo y desconfianza permanente por si los matan.
11-05-03.

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